El 31 de enero, un miltante del Movimiento Popular Dominicano,
Braulio Vargas, de Navarrete, fue condenado a 20 años en prisión. Vargas
es la más reciente víctima de una campaña de 55 años de represión de
Estado con el objetivo de acabar con el Movimiento Popular Dominicano
MPD, la organización Marxista-Leninista más vieja del país. A pesar del
de terrorismo del Estado, el MPD sigue oponiéndose al dominio de la
oligarquía sobre la inmensa mayoría del pueblo dominicano, a la
intervención del imperialismo en nuestras decisiones políticas, y a la
explotación de los recursos naturales por empresas transnacionales y sus
agentes locales. A través de su larga historia de terrorismo del Estado
y la corrupción, el gobierno dominicano ha recibido el apoyo financiero
y diplomático de Washington.
La creación de la Policía Estatal
En 1965, el gobierno estadounidense invadió la República Dominicana con
42.000 tropas para reprimir una rebelión popular desatada contra un
gobierno de facto, golpista, respaldado por Estados Unidos. Rebelión que
tenía como objetivo inmediato la restauración del presidente electo
democráticamente, Juan Bosch. Después de la ocupación de dos años que
siguió, el personal militar de Estados Unidos se quedó para entrenar a
la Guardia Nacional Dominicana y a la Policía Nacional.
El despiadado gobierno estatal dominicano buscó destruir cualquier
oposición organizada al régimen del Partido Reformista. Las elecciones
corruptas, de nuevo respaldadas por el gobierno estadounidense, puso a
Joaquín Balaguer en el poder desde 1966 hasta 1978.
Este período de la historia dominicana se le conoce popularmente como
“los doce años de terror.” Más de 3.000 líderes de la izquierda y otros
partidos fueron asesinados por la policía estatal de Balaguer. Esta
guerra encubierta se parecía a los esfuerzos de COINTELPRO para
destruir los movimientos de liberación nacional en los Estados Unidos.
Ante el acoso de la represión, los izquierdistas se vieron obligados a
operar clandestinamente; los grupos de estudios arrancarían las portadas
de la literatura comunista, para no ser descubierto leyendo material
prohibido.
En 1961, la oficina nacional del MPD había sido reducida a cenizas por
la policía trujillista y las bandas paramilitares organizadas para tal
fin. Y los Estados Unidos había lanzado una campaña para descreditar la
imagen latinoamericana del MPD, tal como consta en los documentos
desclasificados del Pentágono.
Bajo la cobertura de la Guerra Fría, la CIA estableció sus operaciones
en la República Dominicana para infiltrarse en el MPD y el objetivo de
ejecutar a sus líderes. Uno de los artífices de estas operaciones fue
Dan Mitrione. Con su orientación y los serviles criollos se creó la
Banda Colorada (color del partido reformista), grupo de paramilitares
que operaban como escuadrones de la muerte.
Amin Abel, uno de los jóvenes más lúcidos en la historia dominicana, fue
un antiguo líder estudiantil, asesinado a los 28 años, que había
liderado la apertura al pueblo humilde de la primera universidad de
América, La UASD. La policía lo baleó en su casa delante de su familia.
Maximiliano Gómez “El Moreno” nació en una familia de campesinos en la
empobrecida provincia de San Pedro de Macorís. Gómez se vio obligado a
abandonar la escuela porque no podía comprar zapatos para ir a la
escuela. Poseyendo una actitud humilde, un gran dominio de la teoría
marxista y un firme compromiso con la lucha, El Moreno fue elegido
Secretario General del MPD en 1966. En 1971 fue envenenado en Bruselas,
donde se hallaba como exilado, en un canje por el coronel Donald J.
Crownly, agregado militar secuestrado por un comando del MPD.
Incontables dirigentes de izquierda fueron asesinados, entre ellos: Otto
Morales, Amaury Germán Aristy, Roberto Figueroa (Chapó), Tito Montes,
Henry Segarra Santos, Stalin García, Juan Pablo (Pelayo) Félix.
Todos los anteriores eran veteranos de la guerra del pueblo dominicano
contra la invasión imperialista de 1965 y los estudiantes y
profesionales del marxismo. Aunque el Estado dominicano robó las vidas
de toda una generación de jóvenes brillantes y valientes, que les
impedió tomar su lugar que le corresponde entre sus gente, otros líderes
surgieron y la lucha por una revolución del trabajador en Santo Domingo
continuó.
El FALPO y Sus Sicarios
La generación revolucionaria de El Moreno está vinculada históricamente a
la generación actual de jóvenes dominicanos luchando en las fábricas,
en los campos, en los barrios, en las calles. Obligado a pasar a la
clandestinidad, el MPD organizó un frente político popular en los
barrios de todo el país que se llama el FALPO. La mejor arma de las
masas de obreros, campesinos y pobladores ha sido la lucha directa, uno
de cuyos momentos culminantes ha sido la huelga general, en las cuales
se cierran ciudades enteras.
Las demandas del FALPO han sido los reclamos por el derecho a los
servicios fundamentales: electricidad, agua potable, educación, salud,
así como el fin del tráfico de drogas y el fin de la corrupción
gubernamental. Arriesgando sus propias vidas, Braulio Vargas y otros
líderes del FALPO encabezaron una lucha decidida. La policía dominicana,
entrenada por Miami y Nueva York, en incursiones militares y de
contrainsurgencia, abatió a tiros a decenas de dirigentes juveniles del
FALPO. Según organizaciones de derechos humanos había más de 50
asesinatos extrajudiciales en el 1996, el primer año del gobierno de
Leonel Fernández.
Los líderes juveniles como Jesús Rafael Diplan Martinez “El Chu,”, Yito
Gómez, Junior Espinal, Elvin Amable Rodríguez “Ony”, Osvaldo Torres “El
Fury”, Jonathan Durán, José Aquiles, Jose Rodríguez,fueron asesinados a
tiros en las calles por las fuerzas armadas por atreverse a enfrentarse a
las desigualdades de clases arraigadas que prevalecen. En el mismo
sentido, la reciente sentencia de Vargas se produjo después de un juicio
plagado de irregularidades, donde se hizo evidente la corrupción y la
intimidación abierta por parte de la corte, además de que la forma del
proceso tomó un curso visiblemente político.
Vargas denunció abiertamente el robo ejeutado por la alcaldeza Amantina
Gómez de los recursos del municipio de Navarrete. Como líder del FALPO
en Navarrete él exigió que hubiera un tribunal popular para juzgar a los
gobiernos locales por la malversación de fondos públicos que estaban
destinados a obras públicas.
El habló abiertamente acerca de la participación del gobierno local en
el tráfico de drogas. El FALPO exige que se cumpla la Ley 176-07 de
Presupuesto Participativo aprobada en Julio del 2007 donde la propia
comunidad determina cuáles son las prioridades en obras públicas y la
alcaldía tiene que dar cuenta de la distribución de los fondos públicos
como lo establece la ley.
Después de librar esta campaña, Vargas fue perseguido, difamado,
sometido a las redadas de su casa en medio de la noche y lo obligaron a
pasar a la clandestinidad.
Represión Crea Resistencia
Sesenta y cinco por ciento de la población dominicana sigue viviendo en
la pobreza. El abandono y desamparo por parte de los gobiernos de turno a
los campos, ha obligado a muchos a huir a las ciudades y establecerse
en barrios ausentes de planificación urbana y servicios públicos
básicos. Eso se traduce a que más de un 60% de la población vive en
estos núcleos urbanos donde la ausencia de planes de trabajos y
educación por parte de sus gobernantes limita la salida de la pobreza de
sus moradores. En estos mismos barrios se encuentran las famosas Zonas
Francas, en muchas ocasiones, única fuente de explotación laboral, que
asegura un salario de menos de $70 dólares por semana a cambio de más de
8 horas de trabajo diario y la opción de trabajo los sábados por un
adicional de cinco dólares.
Todas estos frentes de lucha del pueblo dominicano, acompañado por las
diferentes fuerzas de izquierda revolucionaria contra los gobiernos
neoliberales que siguen el modelo económico apostado principalmente por
los Estados Unidos, y otras gobiernos asesinos, han sido factores
fundamentales de la represión estatal y militar contra la izquierda
revolucionaria. Pero la fuerza revolucionaria continúa construyendo el
camino a la victoria, hoy más decidida y unificada que nunca por la toma
de poder en pro a una nación digna. Desde las entrañas del monstruo, el
PSL se encuentra con todas las organizaciones progresistas y
anti-imperialistas de la República Dominicana, exigiendo la libertad de
Braulio Vargas y todos los presos encarcelados injustamente en ese país,
así como la investigación de todos los asesinatos extrajudiciales
cometidos por los gobiernos de Joaquin Balaguer, Hipólito Mejía y Leonel
Fernández, y el enjuiciamiento de los responsables.
