Originalmente publicada en Liberación Periodico, abril 2015
El mes pasado, Walmart anunció que iba a comenzar a aumentar el salario, mejorar horarios y permitir nuevas “oportunidades para avanzar” para sus trabajadores. Walmart es el empleador privado más grande en los Estados Unidos, y sus aumentos espera afectar a 500.000 trabajadores. ¿Por qué Walmart, una compañía conocida por sus terribles salarios y tratamiento de trabajadores, que por décadas ha insistido que salarios mínimos son necesarios para el éxito de una compañía, de repente cambió de idea? No ha tenido un cambio de pensamiento.
En un video por la web dirigido a los trabajadores de Walmart, el CEO Doug McMillon dijo, “…nosotros realmente nos preocupamos por ti como asociados y apreciamos su trabajo cada día” Es una mentira. Estos aumentos son completamente inadecuadas para permitir que empleados de Walmart vivan con dignidad. Trabajadores actuales verán sus salarios aumentar a $9 la hora, y esos mismos trabajadores verán un aumento automático a $10 en febrero del 2016. Pero los trabajadores que comienzan el siguiente año en Walmart tendrán que pasar por un “curso de entrenamiento” por seis meses antes de recibir un salario de $10 la hora.
Sin embargo, la decisión por Walmart para aumentar el salario mas allá del mínimo estatal y federal sí representa un enorme retiro para la corporación masiva que se ha hecho rica pagando salarios de pobreza.
Esta decisión es en respuesta a las acciones de los propios trabajadores de Walmart.
En los últimos años, los trabajadores de Walmart han tenido grandes acciones y mítines en el trabajo que han ido incrementando la presión sobre la corporación.
Los trabajadores están organizando en su mayoría como parte de la Organización Unida por Respeto en Walmart (OUR Walmart), que recibe apoyo del Sindicato Unido de Trabadores de Comida y Comercio (UFCW por sus siglas en inglés). OUR Walmart tiene una tradición de exigir un “salario digno” de $15 la hora, horas semanales de tiempo pleno y mejoras condiciones de trabajo en los locales.
A ellos se les han unido el movimiento de trabajadores de bajos-salarios por todo el país, principalmente en los trabajos de la área de servicios, que ha ido ganando fuerza en los últimos años exigiendo “$15 y una unión.” Esta lucha ha levantado el perfil nacional de la crisis de inequidad y la falta de trabajos con salarios dignos.
Obviamente, los executivos billonarios y millonarios esperan que esta movida les quite la presión sobre ellos y prevenga cualquier otra acción en el trabajo y calmar la militancia de sus empleados.
Pero los trabajadores necesitan aprender la verdadera lección. Esperando que las corporaciones hagan lo correcto no funcionará. Para obtener justicia verdadera, los trabajadores necesitan continuar organizando y expandiendo este movimiento.
En la lucha para mejorar las vidas de los 1,3 millones de trabajadores de Walmart y sus familias, es crítico para todos los trabajadores en los Estados Unidos por el poder y la influencia que la compañía tiene sobre todo el sistema capitalista. Sindicalizando a Walmart podría mover a toda la clase trabajadora, igual como el esfuerzo en las industrias maquinarias lo logró en los años 1930.
El hecho de que unos cuantos billonarios pueden determinar, con solo su firma, si millones de personas se queden en pobreza muestra que este llamado “sistema democrático” en verdad es una dictadura de los ricos. Una sociedad nueva socialista tomaría los billones de la familia Walton, obtenidos explotando a los trabajadores de bajo sueldo, y pondría su enorme negocio bajo el control colectivo para servir las necesidades del pueblo.