El 1 de agosto, la Comisión de Comercio de Illinois celebró una audiencia pública sobre la propuesta de subida de tarifas de Peoples Gas en la Universidad de Illinois Chicago. Luego de que los directivos de Peoples Gas presentaron su plan y los motivos de la subida de tarifas, varias ONG, grupos organizadores y residentes de Chicago arremetieron contra la empresa por su mala gestión y su codicia empresarial.
Mientras los residentes de Chicago no logran pagar sus cuentas y llegar a fin de mes, Peoples Gas ha incumplido sus plazos de actualización de las infraestructuras. Hoy, después de que las amenazas de cortes de gas y recargos por morosidad hayan posibilitado que Peoples Gas tuviese otro año más de ingresos sin precedentes, proponen financiar el resto del proyecto de infraestructuras aumentando la tarifa media de sus cuentas residenciales en 11,83 dólares al mes a partir de enero.
Propuesta de subida de tarifas de Peoples Gas
Peoples Gas abrió la audiencia posicionándose como el núcleo de lo que significa ser de Chicago. Polly Eldringhoff, vicepresidenta de Rendimiento Operacional y Cumplimiento Normativo de la empresa, explicó a los asistentes: “Ayudamos a reconstruir esta ciudad tras el incendio [del Gran Chicago], y hemos contribuido al crecimiento y la reurbanización de todos los barrios de esta ciudad”.
En conjunto, los comentarios iniciales de Peoples Gas pretendían disuadir de las críticas de que la empresa sigue explotando a los trabajadores. Al contrario, la empresa se presentó a sí misma como una empresa en dificultades a pesar de sus beneficios récord. El director de política reguladora y Asuntos de los Gobiernos Locales de Peoples Gas, Tom Aridas, lamentó: “Como cualquiera de los presentes en esta sala que haya visto cómo suben los precios de los alimentos, combustible para conducir camiones o los alquileres mensuales, nosotros también hemos visto cómo suben los costos”.
Aridas argumentó que el aumento de sus cuentas mensuales se vería compensado por el continuo recorte de los precios del gas natural en todo Estados Unidos. Sin embargo, el grupo de defensa de los consumidores Illinois PIRG señaló que las proyecciones actuales de caída de los precios del gas natural en 2024 no están garantizadas, sino que son simples proyecciones basadas en la mejor información disponible en este momento.
Lo que sí se sabe es que Peoples Gas ha seguido obteniendo ganancias récords durante varios años. Peoples Gas obtuvo 208 millones de dólares de beneficios en 2022, aumentando sus beneficios por sexto año consecutivo. Su empresa matriz, WEC Energy Group, obtuvo 1.400 millones de dólares de beneficios en 2022. La subida de tarifas propuesta recaudaría otros 402 millones de dólares para la empresa.
Las y los trabajadores de Chicago exigen que no se suban las tarifas
Mientras que Peoples Gas argumentó que la subida de tarifas sólo aumentaría las cuentas mensuales en 11,83 dólares, si es que, los habitantes de clase trabajadora de Chicago sostuvieron que incluso este “pequeño” aumento sólo contribuiría a exacerbar aún más las desigualdades en el acceso a la energía y a los servicios públicos en toda la ciudad.
Lilly Scales, directora estatal de la Coalición de Empleos No Contaminantes de Illinois, intervino en el foro, señalando que “10 distritos de Chicago, todos mayoritariamente negros, representaron el 50% de las interrupciones de Peoples Gas este verano”.
Ivonne Rychwa, directora de extensión de La Junta Ciudadana de Servicios Públicos, declaró: “He hablado con miles de residentes de Chicago molestos por sus cuentas mensuales. Peoples Gas pretende la subida de tarifas más alta de la historia de Illinois… En Englewood [un barrio de clase trabajadora mayoritariamente negro], más del 40% de los residentes están atrasados en el pago de sus cuentas. Piensen en lo mal que podría ir la cosa en invierno si se aprueba esta subida de tarifas”.
Aunque casi uno de cada cinco habitantes de Chicago se retrasa en el pago de sus cuentas, la mayoría de los cortes de gas se producen en comunidades predominantemente negras. El Chicago Sun-Times señala que el índice de interrupciones es tres veces mayor en las comunidades predominantemente negras, indígenas y latinas que en las predominantemente blancas. Un aumento de 11,83 dólares al mes no haría sino incrementar el número de habitantes de estas comunidades que ya se quedan sin gas durante los duros inviernos del Medio Oeste.
Otros asistentes, como Mohammed Patel, miembro de la comunidad, sostuvieron que es ridículo permitir que los monopolios de servicios públicos que contratan con gobiernos locales o estatales obtengan las mismas ganancias que obtendrían otras empresas en el mercado de valores. Patel declaró al ICC: “Piden un aumento de la rentabilidad de sus fondos propios del 9,05% al 9,9%. La tasa de rendimiento esperada en el mercado de valores es del 10%… No deberíamos esperar que ganen la media esperada en el mercado de valores”.
En el caso de los residentes de la tercera edad, esta expectativa de que Peoples Gas siga ganando lo mismo que otros competidores resulta especialmente desgarradora. Phillippe Largent, representante de la AARP de Illinois, explicó a la ICC que los miembros jubilados de la comunidad viven con presupuestos fijos. Aumentar sus cuentas mensuales significaría renunciar a otros gastos necesarios. “Nadie debería tener que elegir entre comprar alimentos o la calefacción de su casa, pero eso es lo que les ha ocurrido a innumerables ancianos de Chicago”, señaló.
La reconstrucción de las infraestructuras de gas en plena crisis climática
En 2011, Peoples Gas comenzó una modernización de infraestructuras de 2.000 millones de dólares en Chicago, sustituyendo las anticuadas tuberías de hierro por nuevas tuberías de plástico para el año 2030. Ahora, más de una década después, el proyecto financiado por los usuarios ni siquiera está cerca de completarse. Aridas declaró que “más del 80% de las tuberías de hierro están llegando” al final de su vida útil. Mientras tanto, el plazo estimado se ha retrasado hasta 2040 y los costos se han elevado a 8.000 millones de dólares. Sin embargo, Crain’s Chicago Business sugiere que la cifra real se acercará a los 11.000 millones de dólares, con una fecha de finalización prevista para 2048.
Si damos un giro, el gas natural suele promoverse como una forma de energía más eficiente y limpia. El eslogan de Peoples Gas es “Creando un futuro brillante y sostenible”. Pero la quema de gas natural emite metano, un potente gas de efecto invernadero y contaminante atmosférico. Las emisiones de metano procedentes de la producción de gas natural siguen representando aproximadamente un tercio de todas las emisiones de metano en Estados Unidos año tras año, mientras que las emisiones de metano por sí mismas son responsables del 30% del aumento de las temperaturas globales desde el comienzo de la era industrial.
Peoples Gas sigue gastando cantidades exorbitantes de dinero en una modernización de la infraestructura, mientras que consistentemente no logra cumplir con los plazos previstos. Mientras tanto, las emisiones de metano del gas natural están matando el planeta, y esta actualización de la infraestructura sólo serviría para profundizar nuestra dependencia de los combustibles fósiles. Como dijo otro asistente, el pastor Scott Onque, de la Iglesia Bautista Misionera de San Lucas: “¿Por qué gastar dinero a costa de los más pobres para construir una infraestructura al final de su vida?”. En lugar de renovar unas infraestructuras de combustibles fósiles que se están erosionando y aumentar nuestra inversión en gases de efecto invernadero, la ciudad de Chicago tiene que ofrecer y apoyar la transición a una economía verde.
Aumentar los gastos de los trabajadores
Aunque Peoples Gas sostenga que la subida de tarifas es necesaria en un momento en que las infraestructuras se desmoronan, los ciudadanos no tienen la culpa de que la ciudad y el país sigan sin invertir en las infraestructuras que se necesitan. Peoples Gas ya incluye un cargo obligatorio por “planta de infraestructura cualificada” en cada una de sus cuentas mensuales de gas. Se supone que este cargo se utiliza para reemplazar las tuberías viejas por tuberías nuevas, pero Crains Chicago Business señala que Peoples Gas ha logrado reemplazar en promedio más de 60 millas de tuberías por año desde 2018.
Peoples Gas no es la única empresa que aumenta los precios para los trabajadores. La compañía eléctrica ComEd propuso una nueva subida de tarifas que se decidirá en noviembre y que podría entrar en vigor en enero de 2024. Según WGNTV, el aumento de las tarifas incrementará las cuentas de electricidad de los trabajadores hasta un total de 17 dólares más al mes para el 2027.
De igual modo, ComEd justifica la subida de tarifas como necesaria para el mantenimiento y mejora de las infraestructuras que exige la regulación gubernamental. CUB señala que el ex director general de ComEd está siendo juzgado por intentar sobornar al ex presidente de la Cámara de Representantes de Illinois, Mike Madigan, para obtener favores políticos que supusieron un aumento de las tarifas de mil millones de dólares en la última década. Dentro de la propuesta, ComEd también pedía un aumento de la rentabilidad de los fondos de inversió, la cantidad que pagan a los accionistas, que pasaría del 7,85% al 10,5%, para llegar al 10,65% en 2027. ComEd y Peoples Gas, así como las empresas de electricidad y gas Ameren Illinois, Nicor Gas y North Shore Gas, proponen subidas de tarifas este año. Según el Journal-Courier, esto podría suponer una subida récord de 2.900 millones de dólares en las tarifas de los servicios públicos de Illinois.
Una solución real
Durante años, la clase capitalista estadounidense ha logrado invertir en el mantenimiento y desarrollo de nuevas infraestructuras. De Nueva York a Boston, hasta Chicago, la infraestructura energética de Estados Unidos se ha descuidado y necesita urgentemente actualizaciones. Sin embargo, limitarse a aumentar las ganancias de las empresas de servicios públicos no aportará las soluciones que la población necesita.
Tenemos que obligar a las empresas de servicios públicos de propiedad privada a reemplazar las viejas infraestructuras con cargo a sus exorbitantes ganancias, eliminar el lucro y que la distribución de gas en Chicago pase a ser una empresa pública, hacer que el gas natural sea gratuito y accesible para todos hasta que sea posible una transición a la energía sostenible, y acabar con el uso de combustibles fósiles lo antes posible.
Sólo con un movimiento popular por un nuevo sistema podremos garantizar que se dé prioridad a las y los trabajadores por sobre el lucro.
Foto de portada: Tom Aridas, director de Política Reguladora y Asuntos Gubernamentales Locales de Peoples Gas, interviene en una audiencia pública sobre la subida de tarifas propuesta por la empresa, el 1 de agosto. Foto de Liberation News.