Foto: Gaza hoy. Foto: Resistance News Network.
Desde el lanzamiento histórico del levantamiento Al-Aqsa Flood por parte de la resistencia palestina el 7 de octubre, el gobierno israelí del apartheid ha declarado la “guerra total” a Gaza. Israel ha intensificado su escalada militar contra civiles palestinos en Gaza, lanzando misiles contra edificios de apartamentos, mezquitas, un mercado y otras áreas civiles, llevando a bajas generalizadas y acabando con familias enteras.
A pesar de los $3.8 mil millones en ayuda militar anual de Estados Unidos, incluidos los sofisticados sistemas de vigilancia, Israel fue sorprendido por la magnitud de la resistencia armada de Gaza, ya tan acordonada por Israel que a menudo se la conoce como la prisión al aire libre más grande del mundo.
Se alega que Israel está utilizando bombas de fósforo blanco en Gaza, armas que han sido prohibidas internacionalmente . El uso de esta arma en zonas civiles está universalmente reconocido como crimen de guerra. El gobierno israelí también ha dejado de emitir advertencias antes de bombardear edificios residenciales en esta zona, la más densamente poblada del mundo, donde la mitad de los habitantes son niños.
Además de llover bombas sobre Gaza, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, anunció un bloqueo completo de la franja de 16 millas. Gallant dijo, “No habrá electricidad, ni comida, ni combustible, todo está cerrado. Estamos luchando contra animales humanos y así procederemos”. Este lenguaje deshumanizador es abiertamente genocida. Con sede en Estados Unidos la organización de derechos humanosHuman Rights Watch ha calificado el lenguaje del Ministro de Defensa como “una invitación a cometer un crimen de guerra”.
El ministro de Energía de Israel, Israel Katz, dijo en un comunicado que le ordenó a la compañía eléctrica israelí que cortara toda la energía a Gaza. Esto no solo sumerge a 2 millones de personas en la oscuridad, la electricidad es crucial para acceder al agua potable, refrigerar los alimentos y eliminar los desechos humanos. Este dominio unilateral de los sionistas sobre el pueblo palestino expone la falacia de la retórica de “ambas partes son iguales” utilizada para deslegitimar el derecho del pueblo palestino a la autodeterminación y a luchar contra la ocupación.
Israel está bombardeando el sur del Líbano, ha bloqueado Cisjordania y ha entregado 1,000 rifles adicionales a los colonizadores supremacistas judíos, que están aún menos controlados que los soldados.
Israel también ha intensificado la represión contra los presos políticos palestinos. Informes de la región compartieron que Israel está cortando periódicamente la electricidad y el agua en algunas cárceles, suspendiendo las visitas de familiares y retirando la atención médica a los presos enfermos.
Al Haq, un grupo palestino de derechos humanos, ha dicho que este cierre total de la franja constituye un “castigo colectivo de una escala sin precedentes.” El grupo explica que cortar las necesidades básicas para la supervivencia humana y los ataques amplios y sistemáticos contra civiles pueden alcanzar el “umbral para el exterminio.”
Si bien los bombardeos actuales de Gaza son de una magnitud extrema, este no es un fenómeno nuevo. Ha habido cinco bombardeos israelíes importantes en Gaza en los últimos 20 años. En 2021, Amnistía Internacional hizo un llamado a la Corte Penal Internacional que investigue como crímenes de guerra los ataques israelíes contra viviendas residenciales sin previo aviso en Gaza.
El gobierno de Estados Unidos ha ignorado en su mayoría la larga historia de violaciones de derechos humanos de Israel mientras suministra las armas que lo hacen posible. Esta vez, el presidente Joe Biden ha denunciado el levantamiento, dando apoyo incondicional a los sionistas, incluso citando “el derecho de Israel a defenderse.” Israel no puede sobrevivir y mantenerse por sí mismo sin una inyección frecuente de ayuda militar y apoyo político de Estados Unidos, y en este momento, Estados Unidos está apuntalando a Israel prometiendo aún más ayuda militar. Washington está moviendo barcos y aviones militares más cerca a la región para apoyar a las fuerzas de ocupación israelíes y Estados Unidos suministrará una cantidad no revelada de municiones. Esto hace que el gobierno de Estados Unidos sea tan cómplice de esta masacre como Israel.
Los imperialistas se han unido contra el pueblo palestino. Estados Unidos, Reino Unido, Francia e Italia firmaron una declaración conjunta afirmando “el derecho de Israel a defenderse.” Esto le da a Israel luz verde para hacer lo que quiera en Gaza.
