Gloria La Riva es activista sindical/comunitaria, y organizadora anti-guerra, en San Francisco, California. Ella es la candidata presidencial para el Partido por el Socialismo y la Liberación para las elecciones de 2016. Su compañero de lista para la vice-presidencia es Eugene Puryear, activista de Washington, DC. Para conocer más sobre los candidatos, su programa de 10 Puntos y cómo apoyar la campaña, visite www.VotePSL.org
En una parada de campaña presidencial en Miami el 31 de julio, Hillary Clinton pidió el levantamiento del bloqueo a Cuba por parte de los EE.UU. o del embargo, como algunos lo llaman.
Clinton dijo, “El embargo a Cuba tiene que irse de una vez por todas.”
Esto suena increíble, viniendo de una figura política que nunca ha perdido la oportunidad de despotricar en contra de la Revolución Cubana.
Clinton continúa siendo abiertamente hostil contra la soberanía de Cuba, su independencia y socialismo.
Ella simplemente está tomando un enfoque diferente para tratar de socavar a Cuba.
La visión de Clinton no es única. Ella refleja la de muchos en la clase gobernante de los Estados Unidos—pronto, quizá la mayoría—quienes repentinamente ahora están clamando por un enfoque diferente en cuanto a la política de EE.UU. con Cuba para tratar de lograr el mismo objetivo de los últimos 56 años: la desestabilización del gobierno de Cuba y su sistema.
El presidente Barack Obama habló de manera similar el 17 de diciembre, “…vamos a terminar una estrategia anticuada que, durante décadas, no ha logrado avanzar nuestros intereses…”
El discurso de Clinton en Miami estuvo lleno de declaraciones deshonestas acerca de ayudar al pueblo cubano, con la típica actitud imperialista y arrogante de EE.UU. hacia Cuba, Venezuela y el resto de América Latina.
Clinton: “Ellos quieren comprar nuestros productos, leer nuestros libros, navegar nuestro internet y aprender de nuestra gente… Nosotros queremos que los cubanos tengan acceso a más teléfonos, más computadoras, más televisiones de satélite. Queremos que lleguen más aviones americanos, transbordadores y barcos. Me han dicho que Airbnb ya ha empezado. Compañías como Google y Twitter están explorando algunas oportunidades también.
“…aguafiestas regionales como Venezuela se aprovecharon de los desacuerdos para avanzar su propia agenda y debilitar a los Estados Unidos. Ahora tenemos una oportunidad para un comienzo fresco en las Américas”.
“…como Secretaria de Estado, se hizo evidente para mí que nuestra política de aislar a Cuba estaba fortaleciendo el agarre de poder de los Castro en vez de debilitarlos — y que estaba dañando nuestros esfuerzos amplios para restaurar el liderazgo estadounidense en el hemisferio”.
¿Se refiere al tipo de liderazgo que arrastró para abajo a la economía de México con el Tratado de Libre Comercio en 1994 — diseñado por los Estados Unidos — o se refiere al más reciente golpe de estado militar en Honduras en 2009, respaldado por los Estados Unidos? El “liderazgo norteamericano” in América Latina significó la destrucción de cientos de miles de vidas hasta que los países comenzaron a sacudirse la dominación de los EE.UU. con ALBA y otras alianzas.
Al dirigirse a una audiencia cubana de derecha en Miami, la que por durante tanto tiempo ha sido un ariete para las políticas de Washington, Clinton calculó que ella podía calmar su ira y probar las aguas políticas de la Florida. Con ese mismo cinismo político, su campaña política es consciente de que una nueva encuesta muestra que el 72 por ciento de la población estadounidense quiere ponerle un fin al bloqueo.
El discurso de Clinton se remontó a la estrategia de EE.UU. contra la Unión Soviética—que incluyó una carrera de armamentos—la cual contribuyó a su desaparición, en donde propone utilizar “fuerzas externas de la misma manera efectiva cómo lo hicimos en el antiguo bloqueo soviético y en otros lugares” hacia Cuba.
Levantar el bloqueo de EE.UU. ahora
El Partido por el Socialismo y la Liberación y todos los verdaderos amigos de Cuba exigen inmediatamente el levantamiento del bloqueo a Cuba por parte de Estados Unidos por razones completamente diferentes a las que Clinton y la clase dominante han expresado.
Por más de 55 años, el pueblo de Cuba ha estado sometido a una política de trituración de bloqueo para forzarlo a someterse a los dictados de los Estados Unidos. Al negarle a todo el pueblo cubano medicamentos, alimentos y otras necesidades, frustrar el comercio y el comercio internacional—constituye una política genocida. Los Estados Unidos imperialista ha creado un arsenal masivo de armas económicas y políticas que conforman lo que se denomina con más exactitud “bloqueo”.
“Embargo” no empieza a describir lo que acumuló Washington en contra de Cuba, causando $1,2 billones en daños económicos.
Durante todos estos años, Cuba nunca se rindió. A pesar de las duros golpes causados por el bloqueo financiero y comercial de los EE.UU., Cuba ha sobrevivido precisamente por el socialismo y el apoyo arrollador de su gente.
Ciertamente, Cuba se enfrenta a nuevos retos con los planes estadounidenses de y subversión. Los fondos del Congreso actualmente están financiando programas anti-Cuba que se promocionan como “pro-democracia”.
Pero si hay un pueblo, un país y un gobierno que puede enfrentar todos esos retos y continuar defendiendo la Revolución, es precisamente Cuba.
El presidente Raúl Castro hizo clara la posición de Cuba en la cumbre de CELAC el 28 de enero en Costa Rica : “ … Los voceros del gobierno norteamericano han sido claros en precisar que cambian ahora los métodos, pero no los objetivos de la política, e insisten en actos de injerencia en nuestros asuntos internos que no vamos a aceptar. Las contrapartes estadounidenses no deberían proponerse relacionarse con la sociedad cubana como si en Cuba no hubiera un gobierno soberano.”
En lugar de lastimar a Cuba, ponerle fin al bloqueo sería un impulso importante para la economía y un enorme alivio para el pueblo cubano. El levantamiento de la prohibición de viajar de Estados Unidos a Cuba permitiría que el pueblo de los Estados Unidos experimentara la realidad cubana de primera mano, para ver su notable desarrollo social, la seguridad económica, la paz social, y compartir la verdadera amistad.
La prioridad más importante de todo esto es ponerle un fin al bloqueo.
Hillary Clinton y los que tienen diseños ocultos para Cuba pueden seguir intentando otros 56 años; ellos fracasarán de nuevo.
Traducción: Brenda Sólkez