Foto: Manifestantes frente a la Bolsa de Valores en la ciudad de Nueva York el 8 de diciembre. Foto de Liberation News.
Enfrentándose solo contra el mundo entero, el 8 de diciembre el gobierno de Estados Unidos vetó una resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que pedía un cese al fuego humanitario en Gaza que había sido patrocinado por 100 naciones. El respaldo de Washington a Tel Aviv se produjo después de una semana del bombardeo israelí más intenso de Gaza y su población civil hasta la fecha.
La resolución habría exigido un cese al fuego inmediato en Gaza y la liberación inmediata e incondicional de todos los cautivos retenidos en Gaza. De los 15 miembros del Consejo de Seguridad, 13 votaron a favor de la resolución y el Reino Unido, el socio menor de Washington en el imperialismo, se abstuvo.
La Administración Biden bloqueó el llamado al cese al fuego incluso después de que el Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, invocara el Artículo 99 de la Carta de la ONU, que rara vez se usa, para enfatizar ante el Consejo de Seguridad una “catástrofe humana inminente” si no hubiera un cese al fuego inmediato en Gaza.
Apenas un día después de bloquear el llamado al cese al fuego, el Departamento de Estado de la administración Biden anunció que pasaría por alto la revisión del Congreso para acelerar la venta de emergencia de 45,000 proyectiles de tanques a Israel.
Una guerra para ‘salvar la civilización Occidental’
Estas acciones estadounidenses muestran claramente que la carnicería que está teniendo lugar en Gaza es un genocidio estadounidense-israelí. También está más claro que nunca que el régimen que está armando y protegiendo es colonialista, racista hasta la médula y hostil al pueblo de Medio Oriente. El Presidente israelí Isaac Herzog, le dijo a MSNBC el 30 de noviembre que, “Esta guerra es una guerra que no es solo entre Israel y Hamas … es una guerra que tiene la intención, realmente, de salvar la Civilización Occidental, de salvar los valores de la civilización occidental”. Tales tropos racistas se han utilizado muchas veces para justificar asesinatos en masa, desde la matanza de pueblos coloniales hasta el Holocausto, la guerra de Estados Unidos contra Vietnam y los ataques del Ku Klux Klan aquí en casa.
El bombardeando más intenso de la historia
Según funcionarios de salud en Gaza, más de 17,170 palestinos han muerto por bombas lanzadas por Israel suministradas por Estados Unidos hasta la fecha. Alrededor del 40% de ellos son niños. Otros 46,000 han resultado heridos desde que comenzaron las operaciones militares israelíes hace dos meses. Miles más están enterrados bajo los escombros. Ahora, el veto estadounidense es una luz verde para aún más agresión israelí.
El bombardeo israelí de Gaza de esta semana fue el más intenso de la historia. Israel instó a los palestinos a evacuar de la ciudad de Gaza a Khan Younis, la ciudad más grande del sur, pero ahora esa ciudad está bajo fuertes bombardeos. Tel Aviv está bombardeando la carretera de norte a sur, lo que hace imposible viajar. Ahora se están haciendo intentos para obligar a esta población de 2.2 millones de palestinos a ir a las playas de Gaza.
Israel dice que su objetivo es “destruir a Hamás”, pero claramente el pueblo palestino está siendo bombardeado no porque sea Hamás sino porque son palestinos. El objetivo es la limpieza étnica, hacer inhabitable Gaza y empujar a su población palestina a Egipto.
Intentos de humillar a la población
En un acto cobarde destinado a humillar a los palestinos, esta semana la maquinaria de guerra israelí arrestó a cientos de hombres palestinos, los desnudaron hasta quedar en ropa interior y publicaron fotografías de algunos desfilando por una plaza central en la ciudad de Gaza, otros llevados en camiones del ejército. Otras fotos mostraban a hombres palestinos sentados con las manos atadas a la espalda, algunos con los ojos vendados.
Al principio, el ejército israelí dijo que estos hombres eran combatientes que se habían rendido. Más tarde, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) dijeron que los hombres palestinos a los que maltrataron provenían de “bastiones de combatientes” que “deberían haber sido evacuados hace semanas” y eran “presuntos combatientes”.
Pero los palestinos en Gaza sostienen que las redadas fueron arbitrarias y que muchos de los hombres fueron desplazados por los bombardeos israelíes. Muchos fueron liberados, algunos solo para descubrir que mientras estuvieron bajo arresto sus hogares habían sido destruidos. El paradero de algunos aún se desconoce.
Además de la humillación flagrante, este fue un intento de las FDI de reclamar algunas victorias militares de su invasión terrestre cuando, de hecho, el ejército israelí no ha podido asegurar ningún territorio permanente en Gaza hasta la fecha. Se han encontrado con una feroz resistencia de los combatientes palestinos a cada paso.
Los combatientes representan al pueblo palestino
Contrariamente a los informes de los medios de comunicación del establishment, no es solo Hamás quien lucha. Esta es una lucha emprendida por varios grupos que representan a todo el pueblo palestino. Los que luchan desde Gaza son: Hamás (el Movimiento de Resistencia Islámica), la Yihad Islámica Palestina, el Frente Popular para la Liberación de Palestina, el Frente Democrático para la Liberación de Palestina y el Frente Popular para la Liberación de Palestina – Comando General.
La resistencia combinada informa que ha destruido o sacado de funcionamiento a cerca de 500 vehículos militares israelíes desde el comienzo de la ofensiva terrestre. Continúan los feroces combates cuerpo a cuerpo con las fuerzas israelíes en toda Gaza. Al mismo tiempo, la resistencia puede lanzar cohetes tan lejos como Tel Aviv y la Palestina ocupada.
Esta semana Hamás publicó un vídeo sobre cómo pudo fabricar los misiles que ahora dispara en la propia Gaza, ante las narices de la ocupación, a pesar de que el asedio no permitió que el metal ingresara a Gaza. Con gran riesgo para ellos mismos, desenterraron la ordenanza israelí sin explotar que quedó de los muchos bombardeos israelíes de Gaza y la usaron. Encontraron toda una red de tuberías subterráneas que Israel estaba utilizando para robar el agua de Gaza y dirigirla a los asentamientos israelíes cercanos. Desenterraron estas tuberías y usaron este metal para fabricar misiles. Buzos palestinos descubrieron buques de guerra británicos hundidos frente a la costa y sacaron metal de los naufragios y lo fundieron para fabricar cohetes.
Este tipo de determinación e ingenio refleja la voluntad de todo el pueblo palestino de luchar con todo lo que tenga para recuperar sus tierras robadas. Demuestra que incluso con todas las bombas que Estados Unidos suministra, Israel nunca podrá destruir la lucha palestina.
Continúan las protestas
Mientras tanto, al bloquear una resolución de cese al fuego en la ONU cuando tan urgentemente se necesita, Washington permanece aislado y expuesto como el verdadero poder detrás del genocidio en Gaza. Esto ha suscitado la ira de las masas. Inspiradas por la lucha palestina, sublevadas por los crímenes de guerra de los gobiernos estadounidense e israelí, continúan las manifestaciones en apoyo de la liberación palestina.
Apenas la semana pasada en los EE. UU., por ejemplo, miles de personas en la ciudad de Nueva York marcharon en Wall Street para señalar con el dedo acusador a las corporaciones estadounidenses por apoyar a Israel y exigir que las empresas estadounidenses desinviertan de Israel. Los manifestantes también persiguen a los políticos estadounidenses dondequiera que vayan. Esta semana, activistas se reunieron frente a una recaudación de fondos para Joe Biden en Los Ángeles y frente a la casa del Secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, en Virginia del Norte para exigir un cese al fuego, el cese de la ayuda estadounidense a Israel y la libertad de Palestina.
