Foto: David Banks, el canciller de las escuelas públicas de la Ciudad de Nueva York, atestigua ante el Comité de la Cámara sobre la Educación y la Fuerza Laboral/Youtube
Mientras que las administraciones universitarias, las fuerzas policiales y las pandillas de extrema derecha brutalizan y amenazan a estudiantes organizandose por Palestina, el Congreso continúa a llamando a oficiales de la educación en todo el país a testiguar sobre la “crisis del antisemitismo” en los campuses universitarios. Esta claro cómo estas “investigaciones” están diseñadas para disciplinar a estudiantes pro-Palestina y enforzar el cumplimiento con el Sionismo de los funcionarios de educación.
No se trata únicamente de los presidentes de las universidades élites, tales como, Columbia, Harvard, MIT, la Universidad de Pennsylvania, y la Universidad de George Washington encarando con los escrutinios Congresionales. El 8 de mayo, administradores de Berkeley Unified, la Ciudad de Nueva York y los distritos escolares del Condado de Montgomery del estado de Maryland fueron convocados a comparecer ante el subcomité del Comité de la Cámara sobre la Educación y Fuerza Laboral para enfrentar acusasiones de antisemitismo “generalizado” en las escuelas.
Estos tres distritos están entre los más grandes y más diversos distritos escolares del país, en conjunto responsable por la educación de cientos de miles estudiantes. El Comité de la Cámara sobre la Educación y Fuerza Laboral anunció su propósito claramente: “Incidentes antisemitas han explotado en las escuelas primarias y secundarias siguiendo el ataque horrifico de Hamas del 7 de octubre. A los maestros, estudiantes, y profesores judíos se les ha negado un ambiente seguro para aprender y han sido obligados a enfrentar a agitadores antisemitas dada la inacción de los líderes de los distritos.”
La lucha en las escuelas
El pánico fabricado respecto al“antisemitismo” en la educación primaria y secundaria se parece al desarollo de una narrativa en relación a los campus de educación terciaria. El relato es este: Desde el 7 de octubre, incidentes “antisemitas” se han disparado, haciendo a los estudiantes y maestros sentir peligro en la escuela. Estos “incidentes” incluyen— según los informes de organizaciones como la Liga de Antidifamación League, el Consejo de Relaciones Comunitarios Judíos, la Organización Sionista de America y la Asociación Internacional para el Recuerdo del Holocausto—cualquier expresión o imagen pro-Palestina. En algunos casos, lo que se consideraron como incidentes “antisemitas” incluyeron cosas tan inocuas como usar aros en forma de sandías o un hiyab.
Estos grupos sionistas muchas veces se formulan como “organizaciones comunitarias” en relación a los distritos educacionales mencionados. Con tremenda financiación y docenas de empleados pagados, estas organizaciones están profundamente involucradas con el desarrollo curricular y otros asuntos internos de estos distritos a través de sus aparatos de lobby e influencia. Berkeley, la Ciudad de Nueva York, y el Condado de Montgomery en Maryland están no sólo entre los más populosos y diversos racialmente dentro del país, sino también son distritos con las más grandes disparidades de clase en el país.
A pesar de ser una de las ciudades más ricas del mundo, más de 100,000 estudiantes de las Escuelas Públicas de Nueva York—aproximadamente el 10% de todos los estudiantes matriculados en la Ciudad de Nueva York—están sin hogar o de vivienda insegura. Las Escuelas Públicas del Condado de Montgomery sirven a la vez a estudiantes pobres, de clase trabajadora, e inmigrantes en algunas de las zonas más diversas en los Estados Unidos, tanto como a los estudiantes de Bethesda y Potomac que están entre los bastiones más ricos de los suburbios de la clase dominante. No es coincidencia que el Congreso haya seleccionado estos tres distritos—con la posibilidad de llamar a otros como el Distrito de Escuelas Públicas de Columbia—donde la reproducción de la ideología de la clase dominante es particularmente importante.
El racísmo anti-palestino y la islamafobia corren desenfrenadamente
A pesar de los esfuerzos del Congreso y los medios de hacer aparentar que “el antisemitismo” hace estragos, los educadores y los estudiantes luchando por Palestina son los que están siendo disciplinados, acosados y amenazados. En cuanto a las Escuelas Públicas específicamente, cuatro maestros de educación primaria se les dio licencia por hablar en solidaridad con Palestina, en algunos casos en sus redes sociales sociales privadas. Estudiantes árabes y musulmanes han sido específicamente castigados.
A la maestra de matemáticas Hajur el-Haggan la pusieron en licencia por mencionar a Palestina en la línea de firma de su correo electrónico—incluso después que cumplió con el pedido de eliminar el slogan cuando le pidieron. Un estudiante musulmán de la Escuela Secundaria Northwood en el Condado de Montgomery testiguó ante la Junta de Educación la semana pasada que en su escuela, había visto a cuatro empleados filmando e intimidadndo a los estudiantes que participaban en un evento llamado “Día del Hiyab”; confrontando y acosando a estudiantes con ropa con mensajes anti-sionistas; arrancando afiches de la Asociación de Estudiantes Musulmanes de los tableros en la escuela; y otras instancias de acoso y persecución, incluyendo mintiendo sobre las actividades del AEM y comparándolos al KKK. Sin embargo, son los maestros pro-Palestinos que están siendo disciplinados con licencias, censurados, y amenazados con la terminación.
En una parte de este testimonio por parte de una estudiante, ella describe cómo otro estudiante habló sobre sus compañeros de clase musulmanes, “Ojalá que se quemen en el infierno y que se los entierren con los palestinos muertos”. Otros estudiantes que han organizado huelgas, educación popular, u otros eventos admirables y solidarios durante este año escolar han sido similarmente acosados, silenciados y amenazados. Estos ejemplos son evidencia de algo más profundo que los incidentes vistos desde el 7 de octubre.
La idea que cualquiera de estos ejemplos nazca de una sincera preocupación para la seguridad de la gente judía es una mentira. Al inicio de la audiencia, la republicana Suzanne Bonamicci les pidió al comité que condenaran el antisemitismo de derecha como el de Nick Fuentes y la manifestación en el 2017 de “Unir a la Derecha” donde fascistas cantaron “Los judíos no nos reemplazarán”. Aunque obviamente fue un juego político para ganar puntos contra representantes Republicanos obviamente insinceros, ni un miembro del comité condenó a estos honestamente viles actos antisemitas de la derecha extrema.
El rol del Congreso
Antes del amanecer el mismo día que estas audiencias, la audiencia del alcalde de D.C. Muriel Bowser y la Jefa de Policía de la Metropolita de D.C. Pamela Smith ante el Comité de Dirección de los Representantes fue cancelada después que la ciudad finalmente concedió a las demandas de la Presidenta de la Universidad de George Washington Ellen Granberg de brutalmente asaltar y dispersar al campamento solidario en el campus renombrado “La Plaza de Shuhada’ (Mártires)” por los estudiantes en honor a los Palestinos matados en el genocidio de Israel que continúa. El presidente del Comité de Dirección de los Representantes James Comer hizo claro esta dinámica: “Estoy satisfecho que la posibilidad de la audiencia con la Dirección efectuó acción ligera por parte del Alcalde Bowser y el Jefe d la Policía del Metropolito”.
El Representante Brandon Williams de Nueva York interrogó a David Banks, el canciller de Escuelas Públicas de Nueva York, específicamente la falta de despedidas y literalmente burlando y riendo ampliamente a la respuesta tépida que “todos los educadores tienen los derechos de debido proceso legal”, y que no pueden ser despedidos arbitrariamente antes de que se complete una investigación. Durante la audiencia Congressional, el representante de Berkeley Unified fue interrogado sobre la relación entre el distrito escolar y el Consorcio de Estudios Liberados de Etnia, una organización de desarrollo curricular progresista construido sobre el legado del movimiento en California para crear más diversos curriculum a todos los niveles.
Esto demuestra precisamente el propósito de estas audiencias. El Presidente del Comité interrogó cada representante de escuelas para saber exactamente cuántos maestros han echado, cuántos estudiantes han suspendido o expulsado, explícitamente para señalar que éstas son las acciones que se deben tomar. Estas audiencias, con otros ataques contra la educación pública—sean para destruir sindicatos o el tal llamado “teoría crítica de la raza”, “ideología de género”, o cualquier cosa relacionada con los movimientos de “derechos de los padres”—debe ser visto como parte de un asalto de frente completo en la educación pública, la libertad académica y la Primera enmienda más ampliamente.
Sin embargo, las y los estudiantes continúan en pie de lucha. Estudiantes secundarios han organizado huelgas, eventos de educación política, cartas abiertas, testigo ante consejos escolares, presentado quejas sobre el curriculum y la discriminación, entre tantas otras acciones en los últimos meses. Recientemente, estudiantes en Boston organizaron una huelga para unirse con el campamento solidario con gaza de MIT. Las audiencias congresionales, suspensiones, censura, y toda la gama de represión estatal no han quebrado el espíritu revolucionario creciente entre la juventud. Y no es que el Tik-Tok les ha lavado el cerebro como este mismo Congreso nos quiere hacer creer—sino que la juventud ve este genocidio por lo que es.