Mientras Obama y Mitt Romney celebraban su debate final, la candidata presidencial del PSL, Peta Lindsay—quien fue excluida de los Debates Presidenciales—participó en una manifestación en Boca Ratón, Florida antes de expedir el siguiente comunicado relacionado con la política extranjera estadounidense.
El debate de esta noche entre el Presidente Obama y Mitt Romney comprobó que los dos candidatos tienen mucho más en común entre ellos que cualquier otra diferencia de su política exterior.
Los dos candidatos apoyan las sanciones genocidas en contra del pueblo de Irán bajo el pretexto de que dicho país podría algún día construir armas nucleares, a la misma vez de que los dos apoyan el poder nuclear estadounidense que contiene más de 5.000 armas atómicas.
En este aspecto los dos utilizan el tema de las armas nucleares como una cortina de humo para esconder la verdadera agenda de Estados Unidos, derrocar al gobierno iraní y reemplazarlo con un gobierno títere similar al que colocó en el poder al Sha de Irán en 1953 con el apoyo de Estados Unidos e Inglaterra.
Mientras Mitt Romney se dedica a encontrar al culpable por la muerte del embajador norteamericano en Libia, ambos Obama y Romney, acogen y aceptan toda la responsabilidad por la guerra de agresión de la OTAN que desencadenó la actual crisis en Libia. Ambos, el Presidente Obama y el contrincante Republicano desean establecer un gobierno obediente en Libia; Libia posee las reservas petroleras más grandes del continente africano.
Mientras que Mitt Romney finge que el gobierno de Obama no ha apoyado a Israel lo suficiente, los hechos demuestran que el Presidente y ambas cámaras del Congreso continúan suministrando un cheque en blanco al gobierno israelita para que siga con su guerra en contra del pueblo palestino mientras amenaza con generar nuevas guerras en contra de Irán y otros países en el Medio-Oriente.
Ambos, el Presidente Obama y su contrincante Republicano han apoyado la agresiva expansión de misiles surcoreanos, mientras conducen maniobras militares en contra de la Republica Popular de Corea y establecen sanciones económicas en contra de dicha nación.
El Presidente Obama y Mitt Romney intentan mantener la operación de 900 instalaciones de bases militares norteamericanas ubicadas en 130 países alrededor del planeta para poder ejercer el mandato imperial estadounidense, es así cómo se mantendrán los intereses de los grandes bancos y las corporaciones en sus esfuerzos de dominio global.
Ambos, Obama y Romney garantizan la expansión de redes para aviones estadounidenses piloteados a control remoto y la continuación de dichos ataques en el Medio-Oriente y África.
Ambos candidatos apoyan los recortes profundos de las prestaciones sociales y la reducción del Seguro Social y Medicare. A la misma vez que invierten más de $600 mil millones en armas y guerra—más que cualquier otro país en el mundo.
La Campaña Presidencial de Peta Lindsay/Yari Osorio propone la creación de una política exterior basada en satisfacer las necesidades actuales del pueblo estadounidense.
Esto en lugar de un régimen imperialista que a nombre de un pequeño puñado de multimillonarios, banqueros e instituciones financieras, busca subyugar a los pueblos de Latinoamérica, el Medio-Oriente, África, Asia y Europa.
Proponemos el retiro inmediato de toda tropa estadounidense y de cualquier otra potencia de Afganistán, el fin del financiamiento a Israel, la eliminación de las sanciones económicas en contra de Irán, el fin de la política estadounidense que promueve la guerra civil en Siria y el fin a los 50 años de bloqueo económico en contra de Cuba socialista. El desmantelamiento de todas las bases y ataques por medio de aviones a control remoto; y el desmantelamiento de todas las bases militares estadounidenses.
En lugar de una política extranjera que está basada en los intereses del poder económico imperialista, el pueblo estadounidense necesita una política exterior que se base en el respeto mutuo, la igualdad y la autodeterminación.