La diplomacia itinerante de Estados Unidos en el Líbano no está diseñada para resolver la situación allí ni para lograr que Israel detenga los bombardeos, lo que el Líbano necesita con tanta urgencia. En cambio, el objetivo de Estados Unidos es utilizar el bombardeo masivo de Israel de las áreas civiles del Líbano como palanca para lograr un cambio de régimen allí.
Washington está tratando de forzar elecciones presidenciales bajo el arma israelí e instalar a un cliente estadounidense como presidente del Líbano. Los yanquis y su fuerza subsidiaria, Israel, buscan reducir el poder de Hezbolá, la resistencia libanesa, que es tan fuerte tanto en el gobierno como con el pueblo, destruirla si es posible y, si eso no funciona, fomentar la guerra civil en el Líbano.
El 22 de octubre el Portavoz del Departamento de Estado Vedant Patel explicó que “El objetivo de Estados Unidos es llevar al gobierno y al país del Líbano a un lugar donde esté fuera del dominio absoluto de Hezbolá”.
Funcionarios del gobierno libanés le han explicado al enviado especial de Estados Unidos, Amos Hochstein, que para celebrar elecciones tendrían que volver a convocar el Parlamento. Le pidieron a Hochstein que garantizara que Israel no bombardearía un Parlamento convocado, ya que Hezbolá, con sus aliados chiítas y cristianos, tiene 68 de los 128 escaños en el Parlamento. El enviado estadounidense no ofreció esta garantía.
El Ejército libanés nunca defendió la soberanía libanesa
Estados Unidos quiere instalar como presidente a su hombre, el jefe del Ejército Libanés, Joseph Aoun. Esto se debe a que Estados Unidos controla al Ejército Libanés. Patrocina, arma y ha capacitado a más de 32,000 tropas libanesas. Durante años, EE. UU. incluso han operado una unidad de comando subsidiaria conectada con el Ejército dirigido por las Fuerzas de Operaciones Especiales de EE. UU. bajo el nombre clave Lion Hunter.
Washington suministra al ejército libanés armas que tienen tres generaciones de retraso y muchas de ellas son obsoletas. Esto es para asegurarse de que nunca pueda montar una confrontación significativa contra Israel, a quien el Pentágono le da el último y mejor software espía y armamento. Estados Unidos ni siquiera le permite al ejército libanés defenderse cuando Israel le dispara.
El Ejército libanés se creó como una fuerza para contrarrestar la rebelión doméstica, no para defender el Líbano. De hecho, nunca ha defendido la soberanía libanesa de amenazas externas. Actualmente, el ejército libanés ha evacuado del sur, donde se encuentran los combates, y se retiró al norte del Líbano. Está de retirada y dejando en manos de los combatientes de Hezbolá enfrentar los bombardeos israelíes y la invasión terrestre.
Ataques masivos contra civiles
La necesidad más inmediata en el Líbano no son nuevas elecciones, sino que Israel detenga los bombardeos. Desde 23 de septiembre, Israel ha bombardeado y arrasado indiscriminadamente aldeas enteras en el sur, y golpeado repetidamente el sur de Beirut y el valle de Bekka. Ha matado y herido a miles y ha convertido en refugiados a más de un millón de personas, una quinta parte de la población del país, sin ningún lugar a donde ir.
Destruyó seis edificios de apartamentos en un vecindario densamente poblado de Beirut para asesinar a un hombre, el Secretario General de Hezbolá, Hassan Nasrallah, y continúa bombardeando casas allí. Está atacando deliberadamente a periodistas y personal de salud, regresando por segundos bombardeos para golpear a los rescatistas. Bombardea hospitales, alegando que son objetivos militares.
Sus ataques con explosiones de walkie-talkies aterrorizaron a la población civil, ya que cientos de administradores, personal médico, niños en sus hogares, transeúntes en los mercados y otros perdieron los ojos y las manos.
No empezó en octubre
Las potencias occidentales y sus medios corporativos culpan a Hezbolá por iniciar la agresión porque el 8 de octubre de 2023 comenzó a disparar cohetes contra objetivos militares en Israel en solidaridad con la lucha palestina en Gaza. Olvidan convenientemente que Occidente ha estado asaltando el Líbano desde 1916, cuando dividió Asia occidental en colonias. Cada vez que el pueblo del Líbano se ha levantado para hacer valer su derecho a la soberanía y la autodeterminación, las potencias extranjeras enviaron tropas o representantes armados para detenerlos.
La interferencia directa de Estados Unidos comenzó en 1958 cuando envió a los Marines para detener el derrocamiento de un gobierno prooccidental que instaló allí.
Israel, el representante del Pentágono, ha bombardeado a civiles palestinos y libaneses en el Líbano a voluntad durante décadas, especialmente en las ciudades, pueblos y campamentos de refugiados palestinos en el sur. Israel ha invadido abiertamente seis veces. Su invasión de 1982 mató a 20,000, sitió Beirut durante dos meses y luego ocupó el sur del Líbano durante 18 años.
Solo entre 1968 y 1973, Israel organizó 2,000 incursiones de comandos en el Líbano, entrando a voluntad, asesinando a personas que desaprobaba, detonando coches y cartas bomba y destruyendo propiedades. El Primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, fue parte de tal escuadrón de terror que en 1968 incendió toda la flota de aviones civiles en el aeropuerto de Beirut.
Todo esto ocurrió incluso antes de que existieran Hezbolá o Hamas. De hecho, Hezbolá se formó para contrarrestar los bombardeos israelíes y la ocupación del sur del Líbano. Desde entonces, ha liberado al Líbano de Israel en dos ocasiones, en 2000 y 2006. Su disuasión mantuvo al sur del Líbano libre de bombardeos israelíes desde 2006 hasta el año pasado. Esta fue la primera vez para el Líbano. El grupo es visto en el mundo árabe como “el movimiento de resistencia árabe más importante y efectivo en la historia de la resistencia árabe ante Israel”, según As’ad Abukhalil, Analista político libanés.
Condiciones de Israel, condiciones de Hezbolá para un alto el fuego
Aunque debilitado por los ataques israelíes, Hezbolá continúa atacando objetivos militares en Israel, ya que mantiene a raya un ataque israelí en el territorio. Dice que se detendrá cuando Israel termine su guerra en Gaza. Las condiciones de Israel para el cese el fuego en el Líbano están permitiendo a Israel operar dentro del territorio libanés a voluntad y libertad de movimiento para la fuerza aérea de Israel en el espacio aéreo del Líbano. Esto es exactamente lo que hizo Israel en las décadas anteriores a que existiera Hezbolá.
Fomentando la guerra civil
Mientras tanto, El 9 de octubre, el primer ministro israelí Netanyahu emitió un ultimátum. “El país puede tener paz, pero solo si la gente se levanta contra Hezbolá”. Este es un intento de fomentar una guerra civil. Sigue a una advertencia del Ministro de Defensa israelí Yoav Galante en junio en el que dijo que Israel podría infligir “daños masivos” al Líbano y enviarlo “de regreso a la Edad de Piedra”. Subrayando estas amenazas, Israel bombardeó Aitou, una pequeña aldea cristiana en el norte porque había aceptado y albergado a refugiados chiítas que huían de los bombardeos en el sur.
Hay fascistas absolutos en el Líbano a quienes ciertamente les gustaría ver un gobierno proisraelí allí. También hay una élite corrupta en la nómina de Arabia Saudita, los Emiratos Árabes Unidos y EE. UU. que constantemente hablan mal de Hezbolá y tratan de instigar divisiones sectarias entre los 18 grupos religiosos del Líbano. ¿Pero podrá Israel instigar una guerra civil?
Muchos factores mitigan esto.
Esto no es la década de 1980. La gente sabe que Israel jugó un papel muy negativo en la guerra civil de 1975-90, y está tratando abiertamente de instigar otra. Ninguna familia libanesa quedó al margen de esa guerra, que se prolongó durante 15 años y provocó 150,000 muertes libanesas y un enorme sufrimiento.
En el Líbano, en este momento, hay mucha solidaridad sobre el terreno. El puro salvajismo y la depravación del asalto israelí a Gaza ha unido al pueblo libanés como árabes y los ha llevado a apoyar la acción solidaria de Hezbolá. La solidaridad no se basa solo en las comunidades chiítas, donde tiene su sede Hezbolá, y que representan alrededor del 30% de la población, sino que también se encuentra entre cristianos, sunitas y drusos, todas sectas religiosas. Han abierto sus corazones y sus hogares a los refugiados que huyen hacia el norte desde los bombardeos israelíes. Ven a todo el país como atacado por Israel y respetan a los hombres que lo defienden.
Hezbolá es sancionado por Estados Unidos y sus combatientes son etiquetados burlonamente en los medios de comunicación aquí como ” representantes de Irán”. Los mismos medios no mencionas que los combatientes están defendiendo sus pueblos de origen, donde sus antepasados han vivido durante milenios, y donde algunos han tenido que reconstruir sus hogares hasta diez veces a lo largo de los años debido a los ataques israelíes.
Hoy en día, estos combatientes cuentan con el apoyo de muchas personas en todas las comunidades del Líbano que saben que en toda la historia del Líbano los combatientes de la resistencia son los únicos que han rechazado los ataques israelíes y defendido el país. El pueblo del Líbano los alienta a hacer retroceder a Israel una vez más y los alienta a lograr el mejor éxito.
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