Foto: Enfermera votando a favor de la huelga de hoy. Crédito: Minnesota Nurses Association
15,000 enfermeras de 16 hospitales en Minnesota están en huelga. La acción, que durará 3 días, es la huelga más grande llevada a cabo alguna vez en Estados Unidos por enfermeras del sector privado. Su lucha es la lucha de todo trabajador y trabajadora.
Organizadas por la Minnesota Nurses Association (MNA), las enfermeras están en medio de intensas negociaciones con los dueños de los hospitales. Los patronos están obstruyendo las negociaciones y rehusándose a ofrecer concesiones que atiendan las demandas centrales de las enfermeras, lo que ha dejado a las enfermeras sin otra opción que irse a huelga por 3 para obligarlos a negociar.
La mayoría de las demandas de las enfermeras son por las condiciones de trabajo. Los niveles de personal en los hospitales privados a menudo son peligrosamente bajos; solo el año pasado, las enfermeras del MNA documentaron 7,857 instancias de niveles de personal inseguros. Los patronos de los hospitales no solo se rehúsan a contratar suficientes enfermeras, sino que también está el problema de enfermeras que simplemente dejan la profesión por cuán sobretrabajadas están y cómo no se tienen los recursos necesarios para proveer cuidado de calidad.
Otra de las demandas de las enfermeras es un aumento salarial que necesitan urgentemente. Con la inflación más severa de los últimos 40 años y una recesión que parece cada vez más inminente, el poder adquisitivo de todos los trabajadores está siendo aniquilado por completo. Un salario más alto sería una bien merecida recompensa por la heroica labor que llevaron a cabo las enfermeras durante el grueso de la pandemia COVID-19.
La pandemia expuso el estado decrépito del sistema de salud estadounidense. A pesar de que los gastos de salud representan 20% de toda la economía del país, desde el inicio los hospitales fueron incapaces de lidiar con la enfermedad. Esto se debe en gran parte a las tendencias por las cuales las enfermeras se han ido a huelga. Los ejecutivos de los hospitales constantemente buscan maneras de reducir gastos haciendo recortes e intencionalmente contratando menos personal, lo cual obliga a las enfermeras y otros empleados a asumir cargas de trabajo tan pesadas que la situación se convierte en una realmente peligrosa. Sin los esfuerzos extraordinarios y valientes de los trabajadores y trabajadoras de la salud, la tasa de mortalidad hubiera sido hasta más alta.
La visión capitalista para el futuro del cuidad de salud es aterrador –costos altos, pocas enfermeras y cuidado inferior. Esto es una receta para ganancias enormes, pero también para sufrimiento y desgracia para los trabajadores de salud y sus pacientes. Los sindicatos en el sector de la salud están liderando la lucha para remediar la destrucción corporativa del sistema de salud del que todos dependemos –y se merecen nuestro todo nuestro apoyo y solidaridad.
Esta huelga histórica es también un nuevo e inspirador capítulo en la ola de activismo obrero que arrasa por todo el país. Empezando por el “octubre de huelgas” del año pasado, ha habido una creciente tendencia de trabajadores que abandonan sus puestos para afirmar sus derechos establecer nuevos sindicatos en compañías internacionales bien conocidas. Los trabajadores de ferrocarril también han amenazado con irse en huelga al final de la semana.
Cada día, más y más trabajadores se están rehusando a aguantar la constante priorización de las ganancias por encima de sus vidas y el bienestar de la gente. La huelga de las enfermeras de Minnesota es una poderosa expresión de esta resistencia.
