El siguiente es una editorial del periódico Liberación, sobre la guerra actual en Irak.
En 1968, Richard Nixon ganó la presidencia por muy pocos puntos, anunciando que tenía un “plan de paz” para terminar la guerra en Vietnam. Nixon se negó a declarar los detalles. Dijo que haciendo esto le daría una desventaja. El mensaje inequívoco de Nixon fue que las tropas norteamericanas en Vietnam iban a ser reducidas.
En ese tiempo, había mas de medio millón de soldados norteamericanos en Vietnam. La cantidad de muertos por semana era igual a la cantidad que ahora muere cada mes en Irak. Las muertes de los vietnamitas eran muchas veces más altas.
El 15 de agosto, el General David Petraeus, el comandante estadounidense principal en Irak, anunció a los medios que iba a iniciar un plan para “reducir las tropas” en septiembre, implicando que la guerra iba a empezar a desminuirse. Para el siguiente verano, dijo el general, la presencia norteamericana en Irak iba a ser “mas pequeña” de lo que a sido hasta ahora.
Hay unos puntos que son asombrosamente similares entre los dos planes, y más importante en la manera que engañan. Ninguno tiene que ver con el acabo de la guerra.
La gran meta de Nixon fue de aumentar el uso de bombas, incluyendo el uso de armas nucleares, para ampliar el asesinato y la tortura bajo el Programa Phoenix de la CIA, y la “vietnamitazion.”
La vietnamitazion significó hacer gastos de billones de dólares para armar y entrenar al ejército marioneta del Sur de Vietnam para que ellos se matarán en combate en vez de las tropas estadounidenses. Al mismo tiempo, las bases estadounidenses, los consejeros y substanciales—aunque reducidas—cantidades de tropas iban a continuar la ocupación de Vietnam.
El plan de Nixon nunca incluyó la paz, sino la victoria para los imperialistas, a cualquier costo.
Mientras la cantidad de muertes del lado de los soldados estadounidenses fue reducida de 1969-72, al mismo tiempo el total de muertos vietnamitas aumentó muchísimo.
El terrible plan de guerra de Nixon fracasó. Los vietnamitas fueron exitosos y liberaron su país de dominación extranjera en 1975. El costo fue millones de vidas y destrucción masiva.
El régimen de Bush y el Pentágono —igual a los líderes Demócratas en el congreso—son tan dedicados a la victoria como lo fue Nixon hace casi cuatro décadas. Hoy hay mas que perder en Irak para el sistema imperialista de lo que había en Vietnam. Esto se debe a la inmensa importancia económica y estratégica de la región del golfo Persiano/Árabe.
Esta claro que lo que dijo Petraeus sobre la reducción de tropas es nada más que palabras. En el informe de prensa en el 15 de agosto, donde se escuchó sobre el plan de “reducir las tropas,” Petraeus habló contra el “retiro rápido o significante de los Estados Unidos,” advirtiendo que podría causar una perdida de “ganancias que hemos luchado tanto para obtener.”
A la clase dominante capitalista le gustaría reducir las muertes norteamericanas y la oposición popular a la guerra, pero no al costo de una derrota. La alusión vaga de Petraeus de un día retirar las tropas de Irak es solo un intento para adquirir apoyo para la continuación de la guerra.
La construcción de por lo menos 14 bases militares enormes en Irak y la embajada mas grande del mundo en Bagdad nos muestra claramente que por pronto, los imperialistas estadounidenses no tienen ninguna intención de salirse de Irak, si la decisión es dejada para ellos.
Nadie debería ser engañado o pacificado por las mentiras que salen de los generales y políticos. Solo dentro de la lucha y la resistencia del público—en Irak, a través de todo el medio oriente y el mundo, y aquí mismo en los Estados Unidos—se terminará la guerra.
Esto es lo que hace el 15 de septiembre una fecha tan importante.
En ese día, el General Petraeus dará un reporte oficial al congreso sobre el estado de la guerra. El congreso comenzará a debatir el financiamiento de las guerras en Irak y Afganistán sobre los próximos años por una suma de 145 billones de dólares.
Ni un centavo más debería de ir a esta guerra criminal emprendida para el beneficio y la dominación de los imperialistas.
El 15 de septiembre veremos las masas en las calles de Washington, DC, demandando, “¡Que se termina la guerra ahora!”
Veteranos de Irak y Vietnam y familiares de los soldados dirigirán la marcha masiva desde la casa blanca hasta el congreso. La acción fue iniciada por la Coalición ANSWER—actué ahora para terminar la guerra y el racismo—y otros, y ha sido apoyada por miles de organizaciones e individuales. Miles se unirán al “Die-In” durante la marcha el 15 de septiembre. En los días siguientes, mas acciones contra la guerra ocurrirán en Washington, DC.
Ahorita es el momento de escalar acciones masivas para acabar con la guerra. Acompáñenos en Washington, D.C.
